
Eyaculación precoz
La eyaculación precoz es la causa principal por la que muchas parejas no disfrutan plenamente de sus relaciones sexuales. Además de ser la disfunción sexual por la que más hombres acuden a terapia de pareja en Madrid. La falta de control de la eyaculación precoz lleva con frecuencia a problemas interpersonales; de la relación de pareja; y, obviamente, de las relaciones sexuales.
¿Qué es la eyaculación precoz?
La eyaculación precoz es uno de los problemas sexuales por lo que más hombres consultan. Pero si se les pregunta no saben a qué cree que se debe su problema o que tratamiento espera recibir.
En los últimos años se tiende a definir la eyaculación precoz como la incapacidad del hombre de controlar voluntariamente la eyaculación, de manera que ocurre demasiado pronto. En casos extremos, la eyaculación puede ocurrir tan poco tiempo después de la erección, que sucede incluso antes de que pueda comenzar el coito. En otros casos, el hombre puede demorar cierto tiempo, pero no tanto como quisiera y no el suficiente para satisfacer las preferencias de su pareja.
Sin embargo, hay serias dificultades a la hora de establecer una definición precisa, ya que la “excesiva rapidez” de la eyaculación que la caracteriza está sujeta a distintas interpretaciones. ¿Cuál debería ser el criterio para “demasiado pronto”? De todas las opciones que se puedan planear, la mejor de todas es la que da el propio individuo. Si un hombre descubre que ha llegado a preocuparse enormemente a cerca de su falta de control sobre su eyaculación; o a cerca de que esto interfiere con su capacidad para formar relaciones íntimas; o si una pareja concuerda en que existe un problema en su relación, entonces es posible llamarlo de manera razonable eyaculación precoz.
Tipos de eyaculación precoz
Hay ocasiones en las que aparece a diferenciación entre eyaculación precoz primaria y secundaria.
Se considera que un hombre tiene eyaculación precoz primaria si la ha padecido siempre. Por otra parte, cuando el hombre ha controlado la eyaculación en sus primeras relaciones, pero meses o años después pierde ese control, podríamos hablar de eyaculación precoz secundaria.
Sin embargo, a pesar de que teóricamente la diferenciación es muy clara, en la práctica clínica no es así. Hay hombres que presentan el tipo primario solo con algunas mujeres y no necesariamente con las que más le excitan o atraen. A veces sólo tienen dificultad por controlarla eyaculación con su pareja habitual; otros solo con profesionales; en relaciones con mujeres distintas a la pareja habitual; etc. También se dan casos en los que solo tiene eyaculación prematura en determinadas posturas o situaciones; o con determinadas mujeres; o con todas las mujeres pero no siempre, sin que puedan determinar cuándo ni a qué se debe. Hay hombres que al comenzar sus relaciones sexuales tuvieron eyaculación precoz, pero que pudieron controlarla al cabo de meses o años y que más tarde volvieron a sufrirla.
Por su parte, la eyaculación precoz secundaria suele aparecer al surgir otras circunstancias en la relación sexual, como dificultades de erección; problemas de pareja; inicio de una nueva relación; etc. En concreto, la mayoría de los hombres que acuden a consulta con eyaculación temprana secundaria, aproximadamente el 35-40% presentan como problema principal, una disfunción eréctil.
Causas de la rapidez en la eyaculación
El conocimiento del origen de la eyaculación precoz es importante tanto para el profesional que lo trata, como para la persona que acude a consulta. Hay de diferenciar muy bien a la hora de iniciar un tratamiento si la causas es biológica o psicológica.
Aparte de los pacientes con eyaculación precoz ocasionada por anomalías congénitas del aparato urinario o de la médula espinal; o trastornos neurológicos degenerativos, son muy poco frecuentes los casos que pueden atribuirse con seguridad a una causa de naturaleza orgánica.
El eyaculador precoz que acude a consulta manifiesta con frecuencia sus dudas respecto a las causas del problema. El 12% de los eyaculadores precoces que acuden a consulta piensa que la causa de su problema es psicológico, sin pode especificar más. Si consideramos el concepto “psicológico” como algo más amplio, se incluirían aquí factores como ansiedad; educación; falta de experiencia; poca frecuencia; etc.
¿Puede la ansiedad causar eyaculación precoz?
Diversos autores consideran que altos niveles de ansiedad pueden causar eyaculación precoz. Por una parte, la ansiedad activa cambios eléctricos y químicos en el sistema nervioso que pueden acelerar el reflejo eyaculatorio. Por otra parte, el estado de ánimo debido a la ansiedad de ejecución, provocado por el temor de no satisfacer a la pareja y a otros temores, aumenta el deseo de controlar la eyaculación; aún a costa muchas veces de la propia satisfacción. Con esto, lo que se consigue es acelerar el proceso, en vez de retener la eyaculación.
¿Las experiencias tempranas causan eyaculación precoz?
Varios autores sugieren que el condicionamiento temprano es una causa importante de la eyaculación precoz. El hombre comienza sus experiencias sexuales en una situación de preocupación; nerviosismo; y/o tensión, lo que ya por sí solo puede provocar una eyaculación rápida. Al repetirse la experiencia en circunstancias semejantes se produce un condicionamiento de la respuesta. Lo que conduce a una eyaculación rápida de nuevo; y, posteriormente, no pueden controlar la eyaculación en el coito. La práctica clínica nos muestra repetidamente que las experiencias sexuales de muchos hombres con eyaculación precoz se realizan por diversas razones de modo rápido; con nerviosismo; y sin una preparación adecuada.
Además, la mala experiencia vivida con frecuencia en las primeras relaciones condiciona el modo de reaccionar posteriormente en el coito. Muchas veces estas experiencias resultan frustrantes bien por la persona con que se realizan; bien por el lugar inadecuado; por la falta de experiencia de ambos; o por ir a la relación con prisas. Hay hombres, que por muy diversas razones aceleran la relación.
Otras causas psicológicas de la eyaculación rápida
A parte de la ansiedad o el condicionamiento de las primeras experiencias sexuales, se aducen otras causas que pueden incluirse aquí. Así, se atribuye la eyaculación precoz a la escasa experiencia sexual con mujeres; a la mala educación sexual recibida; la falta de interés o apatía sexual; y, por supuesto, a la inseguridad, miedos y temores.
Por último, algunos hombres, alegan en consulta su escasa actividad sexual o a la infrecuencia de las mismas como causa principal de su falta de control de la eyaculación.